lunes, 2 de julio de 2012

Mis Manos



Mis manos hermanadas 
con las tuyas
colmadas del amor que no te dí
perfumadas de jazmín y arándanos
se acercan a tu vida.
Suaves despegan en caricia lenta 
mi torpeza
que se adhiere a lo ligero y cotidiano
que te aleja de mi.
 Te llevan mi lluviosa esencia
para lavar momentos que desunen
nuestros destinos.
Te llevan luz, hasta el ocaso gris
de tus días
y acrecientan claridad a tu corazón.
El tiempo incisivo no perdona
y aturdida veo pasar las horas
arraigadas a mi piel.
Los días se suceden inalterables
mientras espero soñando 
con tu abrazo, tu sonrisa,
y esa carcajada linda
que aún resuena como 
un homenaje tardío, recóndito.
Mis manos van a ti
a tu desmesurada lejanía
como filamentos túrgidos
buscando huir de éste atónito mar
de interrogantes, como modesta súplica
que rasga el cielo de tu abandono,
como dos gavillas hechizadas
en pos de su sol,
cansadas de apretar tántas caricias
en el embeleso de su tallo.
Mis manos, ahuecadas en el vacío
faltas de la huella y tibieza de las tuyas
pálidas hojas donde están inscritas
nuestras verdades más profundas
se sumergen en la jácora vanidosa
y placentera de razones
que se ajustan a mi nubil deseo
de encontrarse...
en ese empalme que articula
en una escala gradual
todo el amor latente, congregado,
postergado, nítido,
novato e inexperto
pero tuyo...


Malu de Lujan


1 comentario:

Rafael dijo...

"Tus manos"... Buscan, quieren, precisan y se retuercen inquietas como un manojo de nervios. Necesitan a las manos que las tomen, a los dedos que las acaricien, a los labios que las besen y a los ojos que las miren. Quizás no haga falta mucho más, y en ese mensaje sin palabras, estará la entrega y recepción de un sentimiento, de una pasión, de un deseo...
Un abrazo y el deseo de que tengas un lindo día Malú.