domingo, 5 de septiembre de 2010

Soltar Amarras




























Exprimo en silencio el zumo
en la pulpa de recuerdos
enclavados en el sembradío del pasado.
Ya no más volver al tramo equivocado
en la investidura glacial
donde suspendidas lunas observantes
y estáticas estrellas
hacen un paisaje irreal.
El pasado, tiempo cósmico
fruto de vivencias donde nada cambia,
ni se mueve, no existe.
Solo arriba a un sol pálido
un aire del jamás
se apagan los inviernos
y los atardeceres son póstumos.
Vengo entristecida del ayer
a salvarme, a recibirme,
he cruzado el umbral
con el corazón destrozado
para calmar su desaliento.
No quiero permanecer anclada
a un tiempo derrotado
porque la vida es ¡ahora!
y es imperdonable que retroceda
a la oscuridad.
Debo ir hacia la luz.
El presente es aquí,
el ahora cubre de granate mi cuerpo
y me hace soslayar
el vinagre de un pasado
fermentado en mi recuerdo.
Me espera el velámen sereno
por mares de perdón
donde habrá nuevas razones
y propuestas de la vida.
Desciendo de mi letargo
al pan de mi alegría
con la fuerza que me hace navegar
amén del llanto.
Necesito atraer la aurora
no el eclipse
la brisa, no la herrumbe o la ceniza
agrupando la penumbra.
Necesito la vida con los ojos abiertos
y tu sonrisa en mi presente
para soltar amarras
para vivir de nuevo.

Malu de Lujan

1 comentario:

Anónimo dijo...

Demostración de una soledad infinita.Pasión que brota en cada célula.