domingo, 11 de noviembre de 2012

En Vuelo

 
 
¿Porqué te alejas?
¿porqué tu paso presuroso
sin volver a mirar
el camino andado?
Yo te miro siempre
escudriñando tu regreso
que demora.
¿Tánto te gusta castigarme
con tu ausencia
sabiendo que cuento los días
como rosario sin fin
uno a uno en mano fría?
¿tánto te gusta mi espera
con esa hambre de ti
que no me deja?
No sé si vendrás
pues ya viniste
a confundirte con mi sombra
a nadar en este mar quieto
de sombras y desvelos
de oleajes y tormentas,
 llevarte sin permiso
el calor de mis sábanas y sueño
con tu rayo irreverente
hacia otras constelaciones.
No supiste,
descubrir la huella
de mi vuelo
para subirte a él.
No entendiste,
mi abrumador silencio.
No alcanzaste,
a ver la rosa en mi ventana
ésa que es inspiración y compañía
aroma y raíz.
Te fuiste,
sin volver el rostro
pero soltaste el pestillo de mi jaula
y ahora nadie me impedirá
¡volar!
 
 
Malu de Lujan
 
 
 
 

1 comentario:

Rafael dijo...

Precioso poema, de verdad que me ha llamado poderosamente la atención el contenido de estos versos.
Un abrazo querida amiga.