Sin Perdón
Siendo una frágil brizna de este universo
que congela su dadiva generosa
tengo la fortaleza de no dejarme amedrentar
en el entendimiento de feroces flagelos
que dilapidan su látigo enérgico.
Se declara en guerra el abismo
Me detengo a medio camino
en esta asfixiante conciencia
que liberta mis sentidos
y hace crecer mi expectativa
de reposo y furia.
Sincronia de almas que acercan su triada
de perfecto retroceso
me dejan dolor de alma
lección de negra imagen
botón que deja la abertura
hacia nuevo ropaje craquelado.
Recibí el peor beso de Judas
que aumenta su abultado cinismo
tras un dejo amargo.
Llanto y holocausto
en forzada actitud de reproche
y mirada gélida
en mil días de pantano
que me dejan atrapada.
Donde no hubo amor
nada queda que prevalezca
y sustituya la ofensa, el oprobio, la negación.
Un rayo partió el silencio en dos
haciéndome sentir cortesana indigna
vejada y abandonada en el páramo
sin tener culpa ni causa,
palabra ni intención,
como en un sueño equivocado
dentro de su pesadilla.
Se rasgó una hoja llena de detalles
en el libro de mi vida
y una chispa creció agrandando el fuego
quemando el espacio donde escribir
nuevas alegrías.
No me rindo jamás
ni cedo ante nada
pero esta vez mi corazón habla más alto
y cae la cortina
por donde no habrá ventana
ni puerta, ni espacio
ni respuesta, ni perdón.
Malu de Lujan
1 comentario:
Somos esa frágil brizna del universos que relata tu protagonista.
Un abrazo y felicidades por este poema.
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